La forma que fluye
- Czar Gutierrez
- 7 abr
- 3 Min. de lectura
Entre el rigor y la fluidez, Camila Rodrigo inaugura el 9 de abril su impresionante serie de abstractos en La Galería de San Isidro.
Escribe Czar Gutierrez

Lo suyo nos recuerda que el acto de crear no es una imposición sobre la materia, sino un pacto con ella. Tanto su retorno a Lima (vive en Santiago de chile) como su presencia en La Galería y en Pinta PArc 2025 confirma la vigencia de su propuesta y su lugar dentro del mapa del arte contemporáneo latinoamericano, donde la abstracción se redefine constantemente en diálogo con el tiempo, el espacio y la memoria visual.
Camila Rodrigo (Lima, 1987) se mueve en el campo de la abstracción con la precisión de quien ha encontrado un método para dialogar con la materia sin sofocarla. Su pintura, lejos de ser un proceso de control absoluto, se convierte en una negociación con el azar, en la que los pigmentos disueltos en fluidos son guiados, pero nunca sometidos.
En esta entrevista conversamos sobre su práctica, sus obsesiones cromáticas y su relación con el negro, un color que en su obra se despliega con una intensidad trascendental.
Tu trabajo parece debatirse entre el gesto espontáneo y una estructura meticulosa. ¿Cómo funciona ese equilibrio en tu proceso?
Desde el inicio, la tela yace en el suelo como un campo de posibilidades. Hay un momento inicial de vacío que requiere de serenidad y concentración, casi como un rito. Me interesa ese instante en el que las capas empiezan a sedimentarse, cuando la pintura aún está viva, líquida, en transformación. Ahí ocurre algo que escapa del control absoluto, pero que también exige un criterio para saber cuándo intervenir y cuándo dejar ser. En ese diálogo con la pintura, me gusta la idea de una presencia contenida, donde la huella del gesto no sea un ruido, sino parte de la respiración del cuadro.

Jorge Villacorta menciona que el negro en tu obra tiene una presencia trascendental. ¿Qué significa para ti este color?
El negro no es ausencia, sino condensación. No lo uso como un recurso dramático o decorativo, sino como una estructura que sostiene la composición y genera profundidad. En mis pinturas, el negro es luz atrapada, un espacio que no solo absorbe, sino que también irradia. Lo veo como un punto de anclaje que permite que los otros colores respiren.

Tu trabajo ha transitado por la fotografía y el diseño antes de desembocar en la pintura. ¿Cómo influyen estas disciplinas en tu manera de abordar el lienzo?
El diseño me dio un sentido de composición y balance, y la fotografía me enseñó a mirar. La idea de la superficie y su capacidad de ser intervenida, manipulada, transformada, viene de ahí. Mi formación en diseño también me hizo entender la importancia del vacío, de los silencios visuales, algo que aplico en mi pintura, donde cada área del lienzo tiene una carga específica, como si fueran espacios de respiración dentro de una partitura visual.
Tu obra se exhibirá en La Galería y también en Pinta PArC 2025. ¿Cómo ves la relación entre tu trabajo y el contexto actual del arte en América Latina?
Me interesa cómo la pintura puede seguir siendo un territorio de exploración en un tiempo saturado de imágenes rápidas y efímeras. En América Latina, el arte está marcado por una carga política muy fuerte, lo cual es importante, pero también creo que hay espacio para una reflexión más sutil sobre la experiencia del tiempo, la materialidad y la percepción. Mi trabajo dialoga con esos aspectos, con la idea de la pintura como un espacio de resistencia ante la velocidad del mundo.
¿Cómo ves la evolución de tu obra en los próximos años?
Sigo explorando la relación entre la estructura y el azar, pero también me interesa la posibilidad de expandir los límites del lienzo, jugar con otros formatos, con la instalación, tal vez con la tridimensionalidad. Lo importante es que la pintura siga siendo un espacio de descubrimiento, no de certezas. En ese sentido, cada obra es un punto de partida, no un destino.

Lugar: La Galería
Inauguración: miércoles 9 de abril, 7.00 p.m.
Hasta: 10 de mayo.
Dirección: Conde de la Monclova 255 - San Isidro.
Horario: De lunes a viernes de 11 a 7 p.m. y sábados de 3 a 7 p.m.
Comments